El ciclista español Carlos Sastre (Cervelo) expresó su satisfacción por llegar cerca de "los hombres fuertes", a pesar de que no haya habido "entendimiento" para alcanzarles, tras la disputa de la decimoctava etapa del Giro de Italia, que se disputó entre Brescia y Aprica, en la que se ascendía el mítico Mortirolo.

"Por detrás no había el entendimiento necesario para recortar diferencias, y fuerzas tampoco. Por lo tanto hemos tratado de salvar el día y contento de poder llegar en ese grupito detrás de los tres hombres más fuertes de la carrera", reconocía el ciclista tras finalizar la etapa.

Sastre, que reconoció no estar al nivel de los mejores, quiso felicitar al equipo Liquigas, que llevó al liderato a su ciclista Iván Basso. "Las sensaciones no han sido malas, las molestias van desapareciendo, pero hay una serie de corredores que van mucho mejor que yo. Hoy hay que felicitar al equipo Liguigas, que ha hecho un sensacional trabajo y ha puesto a sus dos líderes en el podio tras la etapa de hoy", añadió.

El líder del Cervelo lamentó haber realizado tanto esfuerzo en la jornada de hoy y deseó que no le pase factura para mañana. "Ha sido una etapa realmente dura, se ha rodado muy rápido desde el comienzo y ha sido un día de muchísimo desgaste de cara a la etapa de mañana", culminó.