En el reportaje se cuenta también que alguien puso a un detective privado a seguir a Jaime Lissavetzky con el fin de descubrir algún trapo sucio con el que presionar al secretario de Estado para el Deporte para que éste frenara su interés en destapar todo lo referente a la Operación Puerto.

"Claro que lo sabía", confirmó Lissavetzky a AS desde Belgrado. "No tengo noticia oficial, pero mucha gente me había avisado. Yo también lo comenté en ocasiones, pero algunos pensaron que estaba paranoico".

En el informe sale también Luis Sanz, asesor jurídico de la Federación, como abogado de Losa. "Es absolutamente falso. No he sido nunca el abogado de Losa. He exigido una rectificación y si es necesario llegaré a la vía judicial. Las conversaciones publicadas son dos llamadas de Losa pidiéndome consejo sobre Maribel Moreno, y la otra, sobre si quería ser su abogado. Y dije que no".