André Greipel ha logrado 21 triunfos de forma ininterrumpida desde 2008 en las tres grandes, al menos siempre uno en la que se inscribió. En el Giro lleva seis, pero nunca se ha enfundado el jersey de líder: “Sueño con vestirme con la maglia rosa por primera vez. Tengo interés en ver cómo me queda (risas). Otras veces comenzamos con cronos y no dispuse de esta oportunidad que se presentará en Olbia”. El velocista alemán, de 34 años, habla del previsible sprint que se disputará mañana en la primera etapa. Sin embargo, no lo tendrá fácil.

Fernando Gaviria, la bala de Quick Step, debuta en la ronda italiana con las mismas intenciones que Greipel: “Me gustaría luchar por el liderato en la volata del día inaugural”. A los 22 años, el colombiano dice que quiere “aprender y mejorar” a lo largo de las tres semanas: “Afrontaré un panorama nuevo para mí, espero corresponder a la confianza depositada”. Otro exponente de la futura generación, Caleb Ewan, también de 22, regresa al Giro tras un gris concurso en 2016: “La temporada pasada no demostré lo que probé que podía hacer en la Vuelta (en 2015 venció en Alcalá de Guadaíra). Deseo resarcirme”.

Respecto a los italianos, Elia Viviani no figura en el nueve de Sky, que ha apostado por arropar a Geraint Thomas y Mikel Landa. Sí que participará el ganador de la clasificación por puntos de 2015 y 2016, Giacomo Nizzolo. Pese a sus dos maillots rojos (este 2017 vuelve el ciclamino), no ha alzado aún los brazos. En la jornada que cerró la pasada edición, en Turín, fue descalificado y la victoria la heredó Nikias Arndt: “Se trata de una dolorosa espinita que pretendo sacarme lo más rápido posible… como debo esprintar para batir a mis rivales”.