Samuel Sánchez no tomará la salida en la sexta y última etapa de la Vuelta al País Vasco, contrarreloj decisiva de 27,7 kilómetros en Eibar. "Los médicos dicen que estoy loco si salgo en la crono", dijo el asturiano este viernes cuatro horas después de caerse cuando acariciba el triunfo en la meta de Arrate. Las heridas en la mano izquierda, en la que tiene el tendón de un dedo medio seccionado, le impiden que hoy tome la salida. Los médicos del BMC consideraban una imprudencia que Samuel lo intentara.

En la jornada de hoy, el corredor del BMC se ha levantado muy dolorido, con la mano inflamada. Enseguida ha visto que era imposible afrontar una contrarreloj de 27 kilómetros. Además, hubiera corrido la etapa con una desventaja bastante improbable de solventar y, según aseguran en el BMC, "arriesgarse a estas alturas de la temporada no tiene sentido".