Aluvión de críticas y cruces de acusaciones entre el pelotón y los aficionados en las redes sociales por la suspensión de la jornada reina en la Tirreno-Adriático. Los organizadores se reunieron con los distintos protagonistas el sábado, y decidieron que la jornada con meta en Monte San Vicino no se disputaría por unas previsiones de nieve del 100%. “Pensamos en la seguridad de los corredores”, esgrimían como argumento. No obstante, las imágenes de este domingo mostraban la llegada despejada y nevada sólo en los márgenes de la carretera, sin ningún problema en teoría. Existe unanimidad al creer que se debería haber esperado a esta mañana para tomar una resolución más aproximada y acertada.

Sobre todo, se quejaron los escaladores, ya que perdían sus opciones de dar un vuelco a la general en favor de los actuales primeros clasificados y de los contrarrelojistas, que dispondrán el martes de una crono de 10,5 kilómetros en San Benedetto del Tronto. “La triste realidad del ciclismo moderno. ¿Cómo se puede cancelar una etapa la noche anterior?”, reprochó Thibaut Pinot, a 18 segundos del líder, Zdenek Stybar. Vincenzo Nibali colgó un vídeo de la inspección que realizó su preparador, Paolo Slongo. Se veía claramente una calzada en buenas condiciones, sin rastro del temporal vaticinado, y apuntilló para reafirmar su postura: “Una pena para los que amamos este deporte”. Patrick Lefevere, mánager del Etixx de Stybar, no se cortó: "Menudos perdedores, eso sí da lástima".

Alexander Vinokourov, patrón del Astana, pidió a RCS, la empresa dueña de la Tirreno, que programara este lunes un final en alto para compensar. La propuesta no prosperó. De hecho, Nibali y Astana han dejado caer que podrían replantearse acudir al Giro si se aplica de manera tan estricta el Protocolo de Clima Extremo de la UCI. En mayo siempre ascensiones con riesgo de nevadas. Taylor Phinney, a favor de la supresión, contestó al Tiburón: “Un poco exagerado. Como grupo tendríamos que permanecer unidos. Lamentarse no ayuda a nadie, ni al ciclismo ni al público ni a nosotros”. Gianni Bugno, presidente de la Asociación de Ciclistas Profesionales, también respaldó a la Tirreno: “Al fin contamos con la posibilidad de decidir, y a cambio nos dedicamos a torpedear”. Sin embargo, la reacción de los tuiteros fue fulminante: criticaron duramente a Phinney, a Bugno y achacaron a RCS una “carrera de vergüenza”.

Sigue la Etapa 2 del Tirreno-Adriático de Ciclismo.