Con 1,64 de altura, 54 kilos, cara de niño y sonrisa perenne, Esteban Chaves pasaría por un chiquillo ilusionado con la Vuelta (que lo está) si no fuera por sus 24 años y sus ambiciones para la general. El colombiano debuta en una grande y ejercerá como líder del Orica: “Que se trate de mi primera carrera de tres semanas me llena de motivación. Llevar la capitanía de mi equipo me da confianza y responsabilidad, sé que debo darlo todo. Ojalá termine lo más arriba”. Para Orica supone también la primera ocasión en la que sale a por un top-ten. Un cambio de mentalidad. Y apuntan a revelación.

Para llegar aquí, Johan Esteban (“No me gusta Johan de nombre, prefiero sólo Esteban”) ha superado una difícil dolencia en el plexo braquial derecho, que se produjo en una caída en el Trofeo Laigueglia, en febrero de 2013. “Siete especialistas diferentes me dijeron que no iba a recuperar la movilidad del brazo. Sin embargo, me sometí a una cirugía bastante invasiva y he podido seguir adelante con mi trayectoria deportiva, aunque no logro realizar algunos gestos para mi vida cotidiana”.

Chaves perdió 2013 entero, pero Orica confirmó su acuerdo de cara a la presente temporada tras ficharle procedente del Colombia. “Aquella dolorosa situación me hizo madurar y crecer como persona. En Orica he encontrado una segunda familia. Valoro más las cosas y esta profesión, ya que casi me quedo sin practicarla”. Vaya si la desempeña. En 2011 se proclamó campeón del Tour del Porvenir y en 2012 se impuso en el GP Camaiore y en Las Lagunas de Neila, antes de su complicada lesión nerviosa. En 2014, en su retorno a la competición, ha ganado en California y Suiza.

En alto. Como buen colombiano, Chaves es un escalador ofensivo. “Empecé con doce o trece años y pronto me di cuenta de que la bici y subir montañas me encantaba. Necesito mejorar en la crono, por eso me preparo en el velódromo”. Su sueño no va a resultar fácil de alcanzar: “Deseo conquistar el Tour algún día. La Vuelta será un escalón más en mi evolución”. Para conseguir su meta, tendrá que medirse con bastantes compatriotas: “Quintana, Urán, Betancur, Arredondo, Anacona… conformamos una nueva generación con juventud e ilusión. Por fortuna, se habla otra vez de Colombia”.