NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

TOUR DE OMÁN

Mikel Nieve: “Me siento un poco raro con otros colores”

Tras cinco años en Euskaltel, el navarro debutó en la primera etapa del Tour de Omán con su nuevo equipo, el poderoso Sky de Froome y Wiggins.

OmánActualizado a
Mikel Nieve con su maillot del Sky.

Después de cinco temporadas en el Euskaltel, Mikel Nieve estrenó el maillot del Sky en la primera jornada del Tour de Omán: “Me siento un poco raro con otros colores, la verdad. Antes veía a esta gente dentro del pelotón, y ahora estoy con ellos. Se trata de una motivación más para mejorar como ciclista”. Al navarro le apena recordar el fin de su exequipo: “Tras tantos años, significó una mala noticia para los jóvenes canteranos y los aficionados. Euskaltel ese encontraba muy asentado allí, pero hay que seguir adelante. El principal cambio que percibo entre ambas estructuras es que dispongo de más gente y de más medios que me respaldan en cualquier momento. En carrera, que ruedo en la parte delantera y no atrás. Así vas mucho más cómodo”.

Nieve, que ha firmado dos campañas con el Sky, cumplirá en 2014 30 años. Su misión será la de apoyar a Chris Froome en la montaña del Tour de Francia: “Disputaré el Tour para ayudar a Froome a ganarlo. Supondrá una bonita experiencia trabajar para el triunfo de un compañero, imagino esa alegría”. ¿Y cómo le han recibido sus líderes, Froome y Wiggins? “Los dos son personas normales. Chris es muy cercano y muy majo, se agradece. Wiggins sí que impone un poco más de respeto. Cuando sales a entrenarte con este tipo de corredores, enseguida te das cuenta de su calidad”. Para tratar con sus nuevos socios, ha estudiado “un poco de inglés” durante el invierno: “Sin embargo, como mejor se aprende es en el día a día”.

En Euskaltel, Nieve era uno de los jefes de la formación junto a Samuel Sánchez e Igor Antón. Su rol de gregario de lujo en el bloque británico no le permitirá tanta libertad de movimientos: “Mis aspiraciones han pasado a un segundo plano. Veremos cómo se desarrolla la temporada y si pueden aprovecharse las oportunidades que aparezcan. No me fijo objetivos a largo plazo, sólo el que convertirme en un mejor ciclista poco a poco. Sabré adaptarme sin problemas al papel que me toque desempeñar”. Solidario, gran fondista y ganador de una etapa reina en la Vuelta (2010, Cotobello) y otra en el Giro (2011, Val di Fassa), sólo le falta una victoria en el Tour para completar la colección en las tres grandes: “Quizá surja la ocasión, me gustaría”.