El ciclista italiano Alessandro Petacchi consideró "injusta" la decisión del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) que, a principios de mes, decidió imponerle una sanción de un año de inhabilitación porque fue sancionado "por tener un problema de salud".
Petacchi dio positivo por salbutamol en el Giro de Italia del año pasado y el TAS le impuso una sanción que finalizará el próximo 31 de agosto -el castigo debía comenzar en noviembre de 2007, teniendo en cuenta dos meses que no compitió después del Giro- pese a que el transalpino presentó un permiso médico que le autoriza a tomar cierta cantidad de este producto debido a su padecimiento de asma, una cifra que habría superado cuando dio positivo.
"Mi caso es completamente inusual porque no di positivo por dopaje, algo que los jueces han repetido en reiteradas ocasiones. No hice trampas ni infligí las normas. Simplemente suspendí un test y he sido sancionado por sufrir un problema de salud", manifestó.
No obstante, el ciclista, de 34 años, agradeció al TAS por haberle impuesto una sanción mucho menor que la que solicitaba la Agencia Mundial AntiDopaje, quien pedía "un castigo de dos años o una inhabilitación de por vida", según explicó el propio Petacchi.
"Injusticia"
Sin embargo se mostró dolido porque está siendo "víctima de un acto de injusticia" que no le permite disputar ni el presente Giro de Italia ni el próximo Tour de Francia. Pese a ello, aseguró que piensa continuar en el ciclismo profesional.
"Nunca he pensado en retirarme", dijo el italiano, despedido la pasada semana de las filas del conjunto Milram y que solicitará una reducción de dos días en su sanción para poder participar en la Vuelta a España, que comienza el 30 de agosto.
Según medios italianos, los equipos más interesados en contar con sus servicios son el Saunier Duval y el Lampre, dos escuadras a las que Petacchi quiso agradecer su consideración. "Si un equipo me ayuda a volver a correr, le estaré eternamente agradecido porque este es el peor momento de mi carrera", sentenció, añadiendo que aún se siente "un buen profesional y un ganador pese a todo lo que ha pasado".
