Fabio Felline voló bajo la lluvia en el prólogo inicial del Tour de Romandía. El italiano fue el único capaz (junto a Dowsett) de bajar de los seis minutos (5:57) de los 162 que tomaron la salida en Aigle. Aprovechó un momento en el que el asfalto no estaba tan mojado para destrozar el cronómetro. 4,8 kilómetros a la perfección, su primer triunfo en la especialidad. Etapa y liderato para el transalpino. Su segunda victoria de la temporada tras el trofeo de Laigueglia. 

Los favoritos tuvieron una primera jornada bastante decepcionante. Salvo Ion Izagirre (a 12") y Primoz Roglic (a 9"), el resto de capos mostró un nivel muy inferior al habitual. Froome llegó a 29 segundos; algo mejor lo hizo Simon Yates, que terminó a 18. Los grandes damnificados fueron Richie Porte e Ilnur Zakarin, que perdieron más de medio minuto con el ganador. La lluvia hizo que muchos no quisieran arriesgar y esperarán a mañana para mostrar sus cartas.

Este miércoles el pelotón se adentra en la montaña: 174 kilómetros, cinco puertos y llegada en alto en Champéry, puerto de primera categoría. Rampas de verdadera exigencia que servirán para poner a prueba a los gallos. Se atisba un duelo titánico entre Froome y Porte -entre Sky y BMC-, que hasta llegar a Romandía solo habían coincidido en la Cadel Evans Ocean Race. Cara a cara a dos meses del Tour de Francia, el gran objetivo de ambos.