Hoy ha sido un día diferente para Alberto Contador sobre la bicicleta. Cuando todos preveíamos un duelo Nairo-Contador, ambos nos privaron con un marcaje férreo que acabó con la victoria de Rui Costa en Jebel Hafeet. "Había que jugar la baza de Mollema. Me he dedicado a controlar a Nairo para el beneficio del equipo", dijo el de Pinto al cruzar la meta.

Acostumbrado a ser el auténtico protagonista, el madrileño cedió los galones del Trek a su compañero, que acabó en cuarta posición la etapa. "Siempre soy yo el que tiene que atacar, pero hoy no ha sido así", asegura un Contador un poco descontento con el nivel de la carrera: "La dos etapas anteriores han sido algo débiles, necesito más velocidad para coger ritmo". 

Mañana llegará el fin del Tour de Abu Dhabi y Contador ya piensa en su siguiente objetivo, la París-Niza: "Es una carrera que me gusta mucho e iré a por todas. Seré el líder y espero hacer un gran papel".

Alberto Contador

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