-¿Cómo valora su primer triunfo en esta edición de la Vuelta?

Joaquim Rodríguez

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-Supone una alegría increíble. Llevaba toda la carrera en busca de esta victoria, así que feliz y satisfecho del buen trabajo realizado. Luchar por las etapas y la general ya lo considero algo fenomenal. La jornada resultó complicada. Movistar puso un ritmo fuerte, pero yo me quise probar, recortar distancia en la general, y acerté. Otros cargaron con la responsabilidad y no desgasté al Katusha. No estoy para escoger, tocó en Sotres y ojalá vengan más.

-¿Le da pena no alcanzar el maillot rojo por un segundo?

-No, me veo en una posición perfecta. Pillar el liderato ahora por un segundo más o menos no importa. Ganará el más fuerte, así que debo seguir en la misma buena línea. (En la vertiente contraria a Sotres se encuentra Fuente Dé, donde perdió la Vuelta de 2012 con Contador. Bahamontes recordó la jugada en la salida, y le comentó que apuesta por él: “No voy sobrado de palmarés como para rechazar opciones”. En total, el catalán acumula nueve triunfos en la ronda española).

-¿Cuántas ocasiones más dispondrá para compensar la crono de Burgos?

-Pocas, la verdad, quizá sólo Ermita de Alba. Los días finales serán más de formarse escapadas, sin probabilidad para la gente que aspira al título. Por tanto, a descansar y a dejarme todo este lunes. Para Madrid se habrá aclarado el tema y comandará un líder sólido. También pienso que se guardará y se conservarán puestos por no acabar en alto.

-¿Qué le pareció cómo reguló Dumoulin?

-No entra al trapo, es muy inteligente. Parece que tenga una experiencia de cinco o seis podios en varias grandes. Se comprobará tras Ermita de Alba cómo sale en la clasificación de cara a la contrarreloj. Si anda igual, será muy difícil desbancarle después. Con la bala que aún le queda, intenta llegar menos fundido de la montaña.

-¿Con cuánta ventaja afrontaría con seguridad esa crono?

-Siempre que hago cuentas me salen mal, así que procuraré hacerlo lo mejor posible. El podio es factible. Ojalá esta vez sí caiga lo máximo. Sin embargo, vivo día a día. Esta es una de las Vueltas en las que más tranquilo me siento. No deseo estresarme. Aunque me ayudaría disponer de cuatro minutos, paso a paso.

-¿Se reduce la pelea a tres nombres, Aru, Dumoulin y usted?

-No. En esta Vuelta sólo se habla de esos tres, pero tampoco hay que olvidar a Majka o Chaves. No sólo me fijo en Aru o Dumoulin. Por mi parte, me encuentro muy bien. Una contrarreloj en la etapa 17 no es lo mismo que en la cuarta. Será de fuerza y, tras una jornada de descanso, no va a irle bien a los que no somos especialistas y a muchos otros. La predicción está complicada. Nos faltan tres días para saber. Ganará el que vista de rojo en Burgos. Quién sabe si arriesgaría todo con buenas piernas.