Siempre respetuosa con las personas del ciclismo, ASO decretó un minuto de silencio antes de la salida en memoria de Claude Criquielion, el campeón del mundo belga fallecido por culpa de un ictus. A sus compatriotas Boonen y Merckx se les notó cabizbajos y pensativos en la primera fila. Sin embargo, el corredor del Etixx no pudo meterse en el sprint final y acabó noveno: “Me habría gustado dedicarle un triunfo a él y a su familia”. Ganó el noruego Alexander Kristoff, que extendió su triunfal racha de Qatar (tres etapas) a Omán (una, de momento): “El equipo trabajó a la perfección, me colocó en disposición de disputar la victoria y correspondí a ese enorme esfuerzo. El domingo dispondré de otra oportunidad”.

Kristoff desea que el dominio del Katusha se extienda a la jornada reina del Tour de Omán, este viernes con su meta en la Montaña Verde: “Tendremos a Purito y a Dani Moreno para luchar por la etapa y la general. Están bien y entre los dos pueden hacer grandes cosas”. Como es habitual, los 5,7 kilómetros al 10,5% de pendiente media decidirán o dejarán prácticamente definida la clasificación omaní... porque el sábado se subirá cuatro veces la cota de Bousher Al Amerat: 3,2 km al 8,6%.

Seis corredores parecen en mejor condición y posición para jugarse el título: Valverde, Majka, Van Garderen, Arredondo, Dani Moreno y Fuglsang. Y el murciano, segundo tras Cancellara, aventaja en seis segundos a los otros cinco. “Veremos cómo me siento y cómo se encuentran los rivales, con este calor y un terreno tan duro no existe nada fácil”. Purito, vencedor en 2013 en la cima y con 55 segundos perdidos, no se postula como aspirante: “Si me veo con buenas piernas lo probaré, pero sin presión”. Como Dani Moreno: “Intentaremos hacerlo lo mejor”.