CICLISMO | CARLOS VERONA

"Aunque sea joven, puedo dar un paso adelante en mi carrera"

Carlos Verona, ciclista del Etixx-Quick Step, hace un resumen de su última temporada y habla de la que comienza: "Creo que he cumplido con las expectativas del equipo".

0
"Aunque sea joven, puedo dar un paso adelante en mi carrera"

Carlos Verona afronta su tercera temporada en el Etixx-Quick Step. A pesar de sus 22 años, renovó en septiembre con la escuadra belga hasta finales del próximo curso. Cerró un buen año marcado por su debut en la Vuelta a España, a la que espera regresar en 2015.

 −¿Cómo valora el 2014, un año completo en lo que a calendario se refiere?

−La valoración tiene que ser positiva. Tal vez no he logrado grandes resultados, pero ha sido un año importante a la hora de consolidarme en el World Tour y rendir a un buen nivel. Creo que he cumplido con las expectativas del equipo y he podido disputar un buen calendario. Todo esto se ha visto recompensado renovando mi contrato, así que estoy contento.

−¿Qué le ha pedido su equipo a la hora de renovar?

−Que mantenga esta línea, que siga trabajando. Tener un hueco aquí está caro, pero es uno de los mejores equipos del mundo. Yo soy joven, va a ser mi tercer año consecutivo siendo el más joven del equipo. Aquí tenemos muchas estrellas que tienen que ganar y no recae tanta presión sobre los jóvenes, nos dan nuestro tiempo y nos piden que seamos profesionales y crezcamos poco a poco. Que continúes con tu progresión e intentes dar un paso adelante, aunque quizás no lo digan de una manera tan explícita. Todavía tengo margen de mejora y es lo que espero demostrar.

−Tiene 22 años, pero ya acumula cierta experiencia…

−Exacto, es un buen momento para aprovechar que soy joven pero que también tengo experiencia. En este 2015 puedo dar un paso adelante. Además me veo capacitado, tuve la opción de subir al podio de la última etapa del Tour de L'Aim, fui décimo en el Campeonato de España y estuve en varias fugas de la Vuelta. Mi nivel va creciendo y me siento más cómodo y con más confianza en el pelotón. Aunque sea joven, ya toca dar un paso adelante.

−¿Cuál será el calendario en este 2015?

−Empezaré con tranquilidad, no sé si en Dubai, Murcia o Almería. Haré carreras de una semana, pero veremos cuáles. La idea, en principio, es repetir la Vuelta a España.

−Comparte autobús con figuras como Tom Boonen o Tony Martin, ¿cómo se acostumbra a eso?

−Al principio choca, llegas de un ciclismo mucho más pequeño y de repente entrenas y cenas con gente así. Te preguntas cómo se ha desarrollado todo para que pases de correr en juveniles a eso. Luego entiendes que es un proceso natural, que a ellos también les sucedió. Cuando Tony Martin llegó a HTC también era joven; ellos son humanos, entrenan como tú y se cuidan como tú. Algunos, como Boonen o Martin, tienen unas capacidades naturales por las que son impresionantes para este deporte.

−No es muy habitual que un ciclista español compita con un equipo extranjero…

−No es muy habitual porque hasta hace cuatro o cinco años no faltaban equipos en España y no había la necesidad de irse a correr fuera. Es mucho más fácil estar en un equipo donde todos hablan tu lengua, tienes un calendario y no tienes que hacer los viajes solo. Ahora el ciclismo está cambiando; con la crisis de España apenas tenemos equipos, lo que hay en España se queda pequeño. Al principio no es lo más fácil, pero a largo plazo tiene beneficios. Te acostumbras a hablar en inglés y te enriquece mucho culturalmente. Somos gente de once nacionalidades diferentes. En lo deportivo, no hay grandes diferencias.

−Vive en Italia, ¿tiene permiso para probar la salsa carbonara?

−Temporalmente estoy en Italia, pero no es por motivos de ciclismo, será solo durante el curso escolar. Cuando acaba la temporada disfrutas y entrenas con más relax, pero a partir de Navidad hay que cambiar el chip y centrarse al máximo en lo que yo llamo entrenamiento invisible. En la bicicleta estoy entre tres y cinco horas al día, pero detrás hay un trabajo duro que no se ve, y una parte importante es la alimentación. Por eso pasta sí, pero carbonara poco.

−¿Dónde cree que puede destacar?

−Por el tipo de corredor que veo que soy, prefiero las vueltas por etapas. La Vuelta a España me encantó, creo que soy un corredor diésel. Quizás no sea muy escalador porque soy alto, mido casi 1'90 y peso 70 kilos. Pero desciendo bien, me gusta la montaña y es donde intento mejorar. La resistencia es una de mis cualidades.

−¿Cree que llegará un buen relevo en el ciclismo español para los campeones que ha habido en los últimos años?

−Lo que hemos tenido con Freire, Contador, Valverde o Purito es algo extraordinario, estamos mal acostumbrados. Tenemos tres corredores en activo que pueden ganar cualquier carrera en la que haya montaña. Será difícil de repetir, pero no creo que el ciclismo español esté tocado de muerte, seguirán apareciendo buenos ciclistas. Hay que ser consciente de que el ciclismo de ahora no es el de hace diez o veinte años, donde todo se desarrollaba en Europa. Ahora está globalizado, en el World Tour hay menos equipos europeos y nuestra cuota de mercado es menor. De la cantidad sale la calidad, ahora hay menos cantidad. Seguirá habiendo calidad, pero se verá reducida.

−Durante el parón de invierno se ha hablado mucho de dopaje, aunque en la mayoría de casos se trataba también de otra época.

−Sí, es mi quinta temporada en profesionales y nunca he visto a nadie de mi entorno recurrir a esas prácticas. Parece que tú ves unas cosas y en la prensa lees otras, historias de hace diez o quince años. Me irrita porque es injusto, el ciclismo tiene una muy buena salud, estamos en uno de los mejores momentos en lo que a dopaje se refiere; si no está erradicado, está cerca. Es injusto, pero también hace falta un proceso así. Para poder pasar página hay que sacar los trapos sucios de esta manera. Quizás habría sido mejor que se hiciera más rápido, esto pasa factura en los sponsors. No puede esperarse tanto tiempo desde que hay un positivo hasta que se sanciona un corredor. Si tienes un caso abierto desde hace siete años, se habla del caso durante siete años. No hay que mirar para otro lado, eso hace un flaco favor al deporte. Hay que agarrar los problemas, pero sin que se alargue tanto en el tiempo. También hay que hacer llegar el mensaje de que esto está cambiando.

−Y sobre el ciclismo que viene, ¿cómo recuerda la situación de la cantera en España?

−Ha pasado unos años muy malos por la crisis económica. Los equipos de las escuelas vivían de pequeños patrocinios gracias a los negocios locales y ahora muchas de esas escuelas han tenido que cerrar. Han desaparecido muchas escuelas, pero ahora veo algo de regeneración. Entreno por Madrid y me cruzo con muchos chavales, la afición está ahí y solo hace falta que haya más medios, que exista el tejido para que puedan desarrollarse y crecer. Es cuestión de que mejore la situación económica y que las pequeñas empresas puedan apostar de manera altruista por el ciclismo. En Madrid no hay muchas escuelas, pero las que hay lo están haciendo bien. Personalmente, me gusta mucho la iniciativa de Alberto y Fran Contador, hace falta algo así. Es de agradecer que lo haga un ciclista de su talla.

−En su caso, complementa su carrera profesional con estudios universitarios…

−Estudio marketing e investigación de mercados en una universidad online. Lo empecé al terminar bachillerato. Quería estudiar, pero también tener tiempo para apostar por la bicicleta. El mundo del ciclismo se acaba pronto. Te permite un espacio y te puedes formar, aunque no puedas seguir del todo el ritmo escolar. Así siempre será más fácil la reinserción al mercado laboral. Es un buen complemento, cuando firmé con Omega mi padre me dijo que esto era como un master, una oportunidad para descubrir muchos lugares que de otra forma sería imposible, además de ser ciclista. Es una de las cosas que más me gusta de mi trabajo, poder estar en China o Australia, pasando por California, o incluso la Vuelta a España. Estar un mes de gira por España con la bicicleta es algo muy bonito que también te prepara para el futuro.

−Y para terminar, ¿un objetivo para este 2015?

−Me gustaría levantar los brazos. Sé que es difícil, más para un corredor como yo, que trabajo para otros en la mayoría de carreras. Pero si corro 70 días, seguro que tengo oportunidades en cinco. Habrá que aprovechar las que se presenten y probar suerte. Sería algo bonito e importante para mi carrera. Me daría una confianza necesaria para seguir creciendo como ciclista.