A instancias de una solicitud del PP, el Ayuntamiento de Ponferrada debería haber facilitado ayer los documentos sobre los contratos de patrocinio y las cuentas del Mundial de ciclismo. Disponía de un mes de plazo, a pesar de que el Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales fija un máximo de cinco días. Sin embargo, aún no se ha publicado el expediente y el equipo del alcalde, Samuel Folgueral, alega que debe adaptar las cantidades a la Ley de Fundaciones, ya que los Campeonatos se organizaron a través de su Fundación de Deporte. En el futuro, habrá un debate monográfico.

Este martes, el pleno del Ayuntamiento aprobó la modificación del presupuesto de 2014 para cargar dos millones de euros al superávit de este año. Así, se quieren evitar problemas de liquidez a las arcas municipales, ya que con su inclusión en los presupuestos de 2015 “no se afrontarían ni facturas ordinarias y se figuraría en el apartado de morosos”, según fuentes del consistorio. Esa cifra, que Caja España prestó y que la Junta de Castilla y León avaló, corresponde al último pago del canon de cinco millones para la Unión Ciclista Internacional (UCI).

Antes se abonaron tres millones (otros dos avalados por la Junta), pero faltan por finiquitarse varios frentes. Sobre todo, un anticipo de 800.000 euros del Servicio de Transporte Urbano de Ponferrada y un crédito de 2,4 millones del Banco Santander para vallas e infraestructuras. La Junta de Castilla y León aportó 500.000 euros a fondo perdido y Nautalia, empresa encargada del alojamiento y la manutención, otros 500.000, con condiciones. Porque Nautalia, proveedor exclusivo, se aseguró recuperar ese “donativo” adelantado y sólo pagaría como patrocinador con unos beneficios de explotación a partir de 750.000 euros.

De esta forma, Folgueral ha asumido 2,5 millones de déficit, que la oposición amplía a siete. El presupuesto del evento rondaba los 10,3 millones (más IVA). Pese a que se estipuló una exención fiscal del 90% para los sponsors, la cita no resultó atractiva. Ponferrada calculó un impacto de 60 millones y alrededor de 300.000 visitantes, números alejadísimos de la realidad. Los comerciantes anunciaron pérdidas en la misma semana de competición (del 21 al 28 de septiembre). La Selección no durmió en León, sino que lo hizo en O Barco (Ourense). Y todavía no se conocen las cifras oficiales.