El diario El Tiempo resaltaba ayer en los quioscos colombianos por su portada teñida de rosa y su titular principal: ‘Nairo rompió la historia’. También sus ocho páginas interiores dedicadas al Giro de Italia lucían el mismo tono. “Llevo diez años en este periódico y es la primera vez que la cabecera cambia de color, eso demuestra lo que significa”, explica a AS Lisandro Rengifo, el redactor que coordina el ciclismo. “Colombia lleva dos semanas de rosado, es el color de moda”, añade el periodista.

También publicó su portada en rosa El Espectador, el periódico de la competencia, bajo el título: ‘Se puso de ruana el Giro’. La ruana es el poncho típico de Colombia, muy usado en Boyacá, la región que vio nacer a Nairo Quintana, a quien le llueven los apodos tras su victoria en el Giro. Unos le llaman El Negrito. Otros, El Cóndor, símbolo de la bandera nacional. Pero el sobrenombre que más prolifera por los medios de comunicación de su país es el de Nairoman (algunos lo escriben Naironman). De paso, al segundo clasificado, Rigoberto Urán, lo han bautizado Rigonaitor. Ambos coparon todos los titulares y eclipsaron la campaña electoral por la presidencia, que se vota el día 15.

Las ruanas invadieron el domingo Cómbita, el pueblo del héroe. Nairo nació en Tunja, la capital de Boyacá, a 3.000 metros de altitud, pero se crió en esta localidad. Ahí empezó a pedalear para ir a la escuela en Arcabuco, a 16 kilómetros.

Muchos habitantes de Arcabuco se acercaron a Cómbita para vivir con sus vecinos la victoria de Nairoman. En Cómbita, un municipio de 13.000 habitantes, unos 5.000 paisanos estaban reunidos frente a una pantalla gigante cuando Quintana se coronó en Trieste. También había ruanas rosas. Igual que la camisa del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, que se incorporó a la fiesta acompañado de Fabio Parra, podio en la Vuelta y en el Tour.

Santos definió la jornada como “un día histórico para Boyacá, para Colombia y para Cómbita”; mientras que Parra aprovechó la ocasión para recordar su pronóstico del 7 de mayo: “Este año, Colombia no solo tiene la posibilidad de ganar el Giro, también puede meter dos en el podio”. ¡Bingo!

En la distancia, Lucho Herrera, coetáneo de Parra, ganador de la Vuelta 1987, también envió felicitaciones “de todo corazón” a Nairo. Igual que Martín Cochise Rodríguez, el pionero, vencedor de dos etapas en el Giro en los 70, que pidió “más inversión para el ciclismo”.

Colombia disfruta de la vida en rosa. Porque, como explica Lisandro Reginfo, “la Nairomanía se ha convertido en una locura, en una religión... Es una vaina descomunal”.