En plan campeón, Zdenek Stybar se llevó la última etapa y la general en el Eneco Tour. La carrera ha rendido homenaje a dos joyas de las clásicas en las jornadas finales: el sábado, David López se impuso en La Redoute, mítica cota de la Lieja-Bastoña-Lieja; esta tarde, Stybar ha vencido en la catedral de las piedras, el Kapelmuur, que desde 2012 forma parte de la E3 Harelbeke debido al cambio de recorrido que se produjo ese mismo año en el Tour de Flandes. El Kapelmuur, un símbolo del ciclismo belga, ya cerró el Eneco de la temporada pasada, y lo volverá a hacer en 2014.

El checo del Omega, de 27 años, atacó a falta de cinco km y atrapó y superó a Ian Stannard, último superviviente de la fuga del día, a 250 metros de la línea de meta. Stybar ya demostró en la París-Roubaix que los adoquines se le dan bien. Procedente del ciclocross (es doble campeón mundial y de la Copa del Mundo), sólo un toque con un espectador y una avería le privaron de aspirar a la victoria (terminó sexto). Él fue el único que aguantó las embestidas de Fabian Cancellara, posterior ganador.

En la tercera etapa de esta ronda también mostró otra de sus cualidades: una excelente punta de velocidad para batir a Richeze, potente sprinter. Operado de una lesión de rodilla en mayo, ha logrado en su regreso su quinto triunfo en el World Tour, tras la crono por equipor de la Tirreno 2013 y una jornada en el Tour de Polonia 2012. El neerlandés Tom Dumoulin (Argos, segundo) y el ucraniano Andriy Grivko (Astaná, tercero) le acompañaron en el podio.