¿Cómo llega al Tour?
Bien. La preparación ha ido muy bien y también estoy contento con mis resultados. He sacado más puntos UCI que a estas alturas del año pasado, en el que acabé primero en el ránking. Al no disputar el Giro, en el que fui líder, quizás no se ha hablado tanto de mí. Pero los resultados son buenos.
Sólo ha corrido el Tour una vez. ¿Puede faltarle experiencia ante otros rivales?
Por un motivo u otro, sólo estuve en 2010. Y me encantó. Y no, no creo que me vaya a faltar veteranía a estas alturas. Al fin y al cabo los rivales van a ser los mismos: Froome, Contador, Valverde... El Tour, cierto, es más estresante que cualquier otra carrera. Pero lo es para todos.
¿Qué le ha decidido a alistarse en este Tour?
Las contrarrelojs. Este año no son largas y llanas en las que tienes que ir a 55 km/h. Las dos son más cortas y más duras, sobre todo la segunda.
Y eso le da más posibilidades. ¿Para qué objetivo?
Mi intención es hacer el mejor puesto posible en la general y ganar una etapa. Y quiero irme con la tranquilidad de saber que es el puesto que merezco, sea el octavo o el primero.
No descarta la victoria.
No renuncio a ella, no. El año pasado fui segundo en el Giro y tercero en la Vuelta. Y pude ganar las dos. Soy un corredor más maduro. Sé que es complicado, pero si tengo que descartarme del triunfo será en la carretera, no de entrada.
¿Principal rival?
Froome, sin duda. Es el más fuerte con diferencia. Y tiene un equipazo. En el Dauphiné, en los momentos difíciles, siempre había cinco o seis compañeros a su lado. Ahí estaremos varios buscando su fallo: Contador, Valverde, Schleck, Van den Broeck, Evans, yo... Pero si está como en el Dauphiné, será muy complicado.
Hablando del Dauphiné. Perdió casi tres minutos con Froome en la crono.
Me fue fatal. No hay excusa que valga. Volví a ser el peor Purito de las contrarrelojs. Mi consuelo es que en el Tour no será un terreno tan llano.
¿No le sirvieron los ensayos en el túnel del viento de Silverstone?
No me adapté a la nueva postura. El cuerpo se me iba hacia adelante. En el Tour volveré a mi antigua postura con algún retoque.
Hablaba de ganar una etapa. ¿Le he echado el ojo a alguna en especial?
Hay varias que pueden irme bien, pero no puedo pensar en una en concreto. Sé que puedo estar con los mejores en las etapas de montaña y que tengo una buena punta de velocidad, superior a varios de ellos. Se tienen que dar las circunstancias. Sobre todo encontrarme muy bien el día en concreto.
¿Qué le parece el recorrido?
Duro. Muy exigente. Quizás los Pirineos no lo son tanto este año, pero la última semana en los Alpes es espectacular.
¿Allí se decidirá todo?
Los primeros días son peligrosos. Algo ocurrirá antes de que lleguemos a los Alpes. Pero será allí cuando se decida el vencedor.
¿Cuál puede ser su principal problema en el Tour?
El nerviosismo de los primeros días, las caídas. Por lo demás, estoy muy contento de cómo es el recorrido.
¿Qué tendría que pasar para que ganara?
Que todo me saliera bien y que los demás tuvieran algún fallo.
¿Principal rival de Froome?
Por palmarés tengo que elegir a Contador.
