La 55 edición de la Vuelta a Asturias se inicia mañana en Oviedo y concluirá el 2 de mayo, una ronda en la que la montaña tendrá un especial protagonismo y en la que los corredores Santi Pérez y Fabio Duarte parten como favoritos.
Como novedades, el maillot de líder se asturianiza y abandona el tradicional amarillo para ser de color azul, mientras que la última etapa tendrá final en el monte Naranco, que verá así integrada su tradicional Subida en la ronda asturiana.
La prueba, en la que los escaladores tienen un recorrido ideal para ellos, tendrá un total de 810,9 kilómetros repartidos en cinco etapas en las que se ascenderán un total de 18 altos puntuables.
Santi Pérez (Barbor), reciente ganador del Gran Premio de Llodio y el colombiano Fabio Duarte (Geox), segundo el año pasado y vencedor de una etapa la semana pasada en el Giro del Trentino, parten como principales favoritos.
Quince equipos tomarán la salida mañana en la plaza de la catedral de Oviedo, entre ellas siete escuadras españolas: Euslkaltel-Euskadi, Movistar, Geox, Caja Rural, con los asturianos Joaquín Sobrino y Higinio Fernández, Orbea, Andalucía-Caja Granada y Burgos 2016-Castilla y León.
Tres portuguesas (Barbot, Onda Boavista y LA Paredes), los italianos del Miche, con el vencedor del año pasado Tino Zaballa a la cabeza, los estadounidenses del United Health Care y los colombiano del UPM-UNE, que se han mostrado muy fuertes en las últimas carreras disputadas en España, completan los equipos que tomarán parte de esta prueba junto a las selecciones española y rusa.
La primera etapa llevará a los corredores desde la catedral de Oviedo a Gijón, tras 162,2 kilómetros de recorrido y con El Fito y San Martín de Huerces, como primeras dificultades montañosas de la ronda asturiana, que provocarán la primera criba entre los favoritos.
Al día siguiente los ciclistas afrontarán una etapa con dos sectores: por la mañana tendrán una etapa de 82,9 kilómetros de recorrido rompepiernas pero sin altos puntuables y por la tarde Piedras Blancas acogerá una contrarreloj de 14 kilómetros con el mismo recorrido que en años anteriores.
El turno para los escaladores llegará en la tercera etapa con inicio en Luarca y final en el Alto de El Acebo, de 195 kilómetros y en la que los ciclistas deberán superar cinco altos puntuables: La Garganta, Santa María, Acebo, Pozo de las Mujeres Muertas y la subida final al Alto de El Acebo, clásico final de etapa de la ronda asturiana desde 1992.
Las dos últimas etapas tendrán como protagonista a la capital del Principado. La cuarta comenzará en las instalaciones de Cafés Toscaf (Pravia) y finalizará en Oviedo tras 181 kilómetros y tres altos puntuables.
La ronda asturiana tendrá su broche de oro en el ovetense alto del Naranco, que acogerá el final de la última etapa, de 175,8 kilómetros con inicio en Tartiere Auto (Lugones) y ocho altos puntuables. Lo más destacado será el circuito ''Chechu Rubiera'', al que se darán tres vueltas, con sendas subidas al alto de Muncó, lo que acercará la carrera al aficionado.
Además, los corredores no accederán al Naranco por la ruta habitual desde las calles de Oviedo, si no que lo harán a través de San Cucao y Ules (donde se encontrarán con rampas muy duras), enlazando con los cuatro últimos kilómetros de la subida, por lo que la emoción está garantizada hasta el final.
