El Tiburón del Estrecho dio su primer mordisco

El perfil | Vincenzo Nibali

El Tiburón del Estrecho dio su primer mordisco

El Tiburón del Estrecho dio su primer mordisco

Vincenzo Nibali (Messina, Sicilia, 14 de noviembre de 1984) conquistó en Madrid su primera gran vuelta. En el podio, con la Cibeles de fondo, no pudo contener las lágrimas. Esta ha sido la temporada de su confirmación como la esperanza italiana para las rondas de tres semanas. En el último Giro de Italia fue líder, ganó una etapa y acabó tercero: "¿Por qué no medirme cara a cara con Contador y Andy Schleck? Tras la Vuelta, quiero Giro y Tour".

El Tiburón del Estrecho es ambicioso: "El apodo resume mi carácter y mi origen en la isla de Sicilia". A Nibali le viene la afición por el ciclismo desde niño. Su padre, Salvatore, le regaló una bici de fabricación casera a los 8 años. A los 10, ya subía y bajaba el Etna. "Me gusta la velocidad y me encanta descender rápido". Ahora es uno de los mejores especialistas del pelotón.

A pesar del apego que le tiene a sus raíces, Vincenzo tuvo que cruzar con 17 primaveras a la península para dedicarse a su pasión, ya que hasta los 14 no compitió por la falta de infraestructuras en Sicilia. Carlo Franceschi, director del equipo juvenil de Mastromarco, le acogió en su casa, en la Toscana. Allí pasaba 10 meses al año, y allí sigue conservando una "segunda familia".

En 2002, logró su primer gran resultado: bronce contrarreloj en el Mundial júnior de Zolder. En 2004 repitió medalla, pero en otra categoría: tercero contra el crono en el campeonato Sub-23 de Verona. Giancarlo Ferretti le echó el ojo y le contrató para el Fassa Bortolo, con el que debutó en profesionales en 2005. Desaparecida la formación, Nibali pasó al Liquigas en 2006, con el que se ha convertido en un "gran corredor".