Carlos Barredo era pura adrenalina. Ya sin bicicleta. Después de haberse enzarzado con Rui Costa, ni siquiera las palabras tranquilizadoras de Juanma Gárate (Rabobank) ayudaron al asturiano a contenerse. De camino, andando hacia el autobús del Quick Step, el asturiano no se cortó: "Me ha quitado el aire con dos codazos increíbles. De mí no se ríe nadie. Le espero mañana porque esto no se puede quedar así. Y encima me ha hecho sangre con el puñetazo. Yo iba haciendo mi trabajo en la etapa y quiso pasar por mi lado. Me dolieron mucho". Barredo se quedó sin una rueda de la bicicleta en una pelea que acabó en el suelo.

"No sé qué ha pasado. Me acabo de enterar", dijo José Luis Jaimerena, director del Caisse d'Epargne minutos después de que sucediera el incidente.

300 euros.

El jurado del Tour de Francia se reunió inmediatamente para analizar la situación que, evidentemente, no pudo pasar desapercibida ante la cantidad de personas que vieron el altercado. Ambos corredores fueron multados con 400 francos suizos (300 euros) cada uno por "injurias y amenazas en el final de etapa y por comportamiento incorrecto".

Además, el equipo Quick Step va a hacer uso de su código interno para sancionar a Barredo. Según su director, Wilfried Peeters, "Carlos no tenía que haber respondido de la manera que lo hizo".

Barredo y Rui Costa deberían encontrarse hoy en la séptima etapa de un Tour que se está poniendo interesante. Se nota que hay mucha tensión entre todos los ciclistas.