Indignación por el caso De Boer

TOUR 2001

Indignación por el caso De Boer

El pelotón del Tour de Francia estaba ayer totalmente indignado con la decisión de la UEFA de reducir de un año a dos meses la suspensión del holandés Frank de Boer, jugador del FC Barcelona, tras haber dado positivo con nandrolona.

Los ciclistas y los directores mostraron su desacuerdo por "el agravio comparativo entre los diferentes deportes" y por "la falta de unificación en las sanciones".

La mayoría opina que la diferencia de trato entre el ciclismo y el fútbol se debe a una cuestión económica. En ese sentido se manifestó el gallego Marcos Serrano, noveno clasificado del Tour: "La decisión ha sido una vergüenza. Es el maldito poder del dinero el que ha provocado esta injusticia". Y también Julián Gorospe, director del Euskaltel: "Los futbolistas son más poderosos y tienen buenas vías de recurso".

Eusebio Unzué, director del ibanesto.com, lanzó una irónica sonrisa y una respuesta lacónica: "Sin comentarios... Mientras no se unifiquen todos los deportes, para qué vamos a decir nada". Manolo Saiz, técnico del ONCE-Eroski, se salió un poco del tiesto y culpó al mensajero: "Los periodistas han abusado del ciclismo amparándose en su miseria de cobardía. Si tuvieran que escribir de fútbol lo mismo que lo han hecho de nuestro deporte, no lo harían".

Precisamente Saiz tiene en su escuadra a dos ciclistas, Álvaro González de Galdeano y Jan Hruska, que cumplieron recientemente un castigo por nandrolona a causa de un positivo con su anterior equipo, el Vitalicio. En principio se les sancionó con seis meses, pero luego se les redujo a tres reales y otros tres en suspenso.

Pablo Antón, manager de la ONCE, explicó la diferencia: "Álvaro y Hruska demostraron que su positivo fue por culpa de un producto energético estadounidense. Aun así, la UCI les obligó a cumplir tres meses y le dejaron otros tres en suspenso, que tendrían que asumir en el caso de que fueran reincidentes".